La dieta plant-based se asienta en Castilla y León: cerca del 50% declara incorporar productos de base vegetal a su dieta

• El motivo principal que lleva a los castellanoleoneses a introducir este tipo de productos a su dieta es la salud
• Así lo recoge un estudio elaborado por Vegetales que destaca que Castilla y León es, junto a Asturias, la comunidad autónoma donde más yogures y helados de base vegetal se consume
• Además, más de la mitad considera que los productos plant-based deberían incorporarse a las pirámides nutricionales de nuestro país

 

Casi cinco de cada diez castellanoleoneses, concretamente el 41,8%, declara haber incorporado ya productos de base vegetal a su dieta. Así lo refleja la primera edición del “Mapa de Consumo regional de la Alimentación plant-based en España 2022”, un estudio realizado por la asociación de productores de alimentos y bebidas Vegetales al que han respondido alrededor de 3.000 personas a nivel nacional.

Del mismo se desprende que el 26,6% de la población de la Comunidad consume este tipo de productos a diario, mientras que el 45,3% confirma hacerlo de tres a cuatro veces por semana y el 18,8% una vez a la semana. Así, menos de un 10% declara hacerlo con menos frecuencia.

Como motivo principal, el 59,4% de los castellanoleoneses señala incorporar alimentos de base vegetal a su dieta porque los consideran productos más saludables. El 34,4% lo hace porque les gusta su sabor y un 28,1% de los encuestados los ha introducido como complemento a su alimentación. Además, un 23,4% afirma consumirlos porque considera que es la mejor opción alimentaria para el medioambiente.

Por el contrario, el sabor es el motivo más citado por aquellos castellanoleoneses que aún no han incorporado alimentos de base vegetal a su dieta, en concreto, un 30,3%. Para un 29,2% el precio es la principal razón para no adoptar una dieta plant-based.

A nivel nacional, según datos del informe, la mitad de los españoles -concretamente un 47,6%- afirma haber incorporado a su dieta habitual productos y bebidas de base vegetal en complementariedad con otros productos de origen animal. Este porcentaje viene liderado por las mujeres, ya que un 50,5% señala haber introducido estos alimentos a su dieta, frente a un 42,8% de hombres que afirma lo mismo.

Hoy el consumidor es mayoritariamente flexitariano, es decir, combina proteína vegetal e incluye ciertas porciones de proteína animal sin complejos. Sin embargo, según se recoge en la encuesta, el 51,6% de la población española declara que aún existe una falta oferta de productos vegetales. En este aspecto, el porcentaje de población de Castilla y León que se declara omnívoro es similar a la media nacional: 80,4% y 80,9%, respectivamente. En paralelo, la Comunidad se encuentra por debajo de la media nacional en número de flexitarianos: un 6,5% de los encuestados frente al 7,2% nacional.

 

Los yogures y helados de origen vegetal son los alimentos plant-based más consumidos entre los castellanoleoneses

En cuanto a los alimentos plant-based favoritos, los productos de base vegetal más consumidos habitualmente por los castellanoleoneses son los yogures y helados (56,3%). En segundo lugar, se encuentran las bebidas de almendras (43,8%), seguidas de las bebidas de avena (34,4%) y las de soja (31,3%). Así, en comparación con las preferencias plant-based del resto de comunidades autónomas, Castilla y León es, junto a Asturias, la comunidad autónoma donde más yogur y helado de base vegetal se consume.

Tal y como afirma Natalia Berenguer, presidenta de Vegetales, “los resultados de nuestro estudio muestran claramente que el consumo de alimentos vegetales está cada vez más presente en los hogares españoles. Desde Vegetales aspiramos a impulsar un modelo de convivencia entre productos de base animal y vegetal, ofreciendo alternativas de calidad al consumidor para que sea éste el que elija el producto que mejor se adapte a sus preferencias y distintos momentos de consumo”.

Apuesta de la alimentación plant-based en comedores colectivos y colegios

 

Vegetales aspira a convertirse en el catalizador del crecimiento del sector de la alimentación de base vegetal en nuestro país, impulsando un modelo de convivencia entre productos de base animal y vegetal y ofreciendo alternativas de calidad al consumidor para que sea éste el que elija el producto que mejor se adapte a sus preferencias. Para ello, la asociación destaca la importancia de contar con un reconocimiento legal que disipe dudas sobre estos productos y que establezca qué aporte tienen en clave nutricional y en clave de sostenibilidad mediante, por ejemplo, que los alimentos plant-based formen parte de cualquier pirámide nutricional que se publique, o su inclusión entre las recomendaciones de dieta para los comedores colectivos y escolares.

Preguntados por esta cuestión, el 59,5% de la población encuestada en Castilla y León considera que los productos plant-based deberían incorporarse a las pirámides nutricionales de nuestro país y en los menús de los comedores colectivos y de los colegios. Sobre quién debería impulsar el consumo de estos productos, más de la mitad de los castellanoleoneses (55,6%) consideran que los profesionales de la nutrición son quienes deben hacerlo.